Los canarios son aves hermosas, pero muy delicadas. Sin embargo, en las condiciones adecuadas pueden llegar a vivir hasta 15 años. Para darle mucho tiempo y calidad de vida, es importante conocer los factores ambientales, las enfermedades, así como otros riesgos que puedan afectar su salud o incluso provocarles morir.
Cualquier mascota requiere de cuidados específicos que incluyen un ambiente adecuado, una alimentación equilibrada y revisiones periódicas para prevenir problemas y enfermedades. Si tienes canarios en casa o deseas uno, hablaremos de las causas por las que pueden morir y qué hacer en situaciones críticas para mejorar su bienestar.
Razones por las que puede morir un canario
Pulmonía
La pulmonía es una de las principales enfermedades que afectan a los canarios, sobre todo en climas fríos o en ambientes donde hay cambios bruscos de temperatura. Puede presentarse en la ave si está expuesta a corrientes de aire o humedad excesiva. Es importante estar atento a los síntomas, los cuales pueden ser: dificultad o silbidos al respirar y letargo. Esta condición requiere atención veterinaria inmediata, ya que puede agravarse rápidamente y poner en riesgo su vida.

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Coccidiosis
La coccidiosis es una enfermedad parasitaria causada por protozoos que afectan el sistema digestivo del canario. Los síntomas incluyen diarrea, pérdida de peso y plumas erizadas. Se transmite fácilmente en ambientes no higiénicos, por lo que mantener una jaula limpia es esencial. Sin tratamiento, puede debilitar gravemente a la ave y, en casos avanzados, puede morir. Es importante contar con tratamiento veterinario y medidas de prevención en su entorno para evitar que pierda su vida.
Parásitos intestinales
Los parásitos intestinales son otro problema de salud común en los canarios que pueden causar complicaciones que los lleve a morir. Esta enfermedad provoca desnutrición y pérdida de peso progresiva y suele transmitirse a través de alimentos contaminados o el contacto con otras aves. Aquellos afectados pueden presentar diarrea, plumas opacas y falta de energía. Si no se tratan, pueden debilitarse hasta el punto de perder la vida.
Colibacilosis
La colibacilosis es una infección bacteriana causada por Escherichia coli, que afecta al sistema digestivo de los canarios. Esta enfermedad suele propagarse en lugares con condiciones de higiene deficientes. Los síntomas incluyen diarrea, vómito y pérdida de apetito. Puede ser mortal si no se detecta y trata a tiempo. Para evitarlo, es vital mantener una buena limpieza en la jaula y sus alrededores.
Ataque de un gato
Además de enfermedades, otra razón por la que un canario puede morir es por el ataque de un gato. Aunque no quisiéramos que esto sucediera, es de las causas más comunes de muerte accidental, ya que los felinos son cazadores por naturaleza y aunque no tengan la intención de hacer daño, pueden provocar heridas letales. Para prevenir esta situación, es importante colocar la jaula en un lugar seguro y fuera del alcance de cualquier animal predador.

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¿Qué hacer cuando un canario se está muriendo?
Cuando un canario muestra signos de enfermedad grave o está en sus últimos momentos, es fundamental darle el mayor confort posible. Colócalo en un ambiente tranquilo, lejos de ruidos fuertes y de otros animales que puedan estresarlo. Mantén la temperatura ambiente agradable y bríndale agua y alimento blando que pueda consumir sin esfuerzo. Es recomendable acudir a un veterinario especializado en aves para que pueda recibir los cuidados necesarios o evaluar si hay alguna opción de tratamiento que le permita recuperarse. Ante todo, la tranquilidad y el confort son esenciales en estos momentos.
Los canarios son animales sensibles que pueden enfrentar diversas amenazas a su salud, desde enfermedades hasta accidentes domésticos. Al estar informados sobre las principales causas por las que pueden morir y brindarles un ambiente adecuado, podemos aumentar sus probabilidades de vivir una vida larga y saludable. Si bien algunos problemas pueden ser inevitables, mantener la higiene, prestar atención a los cambios de comportamiento y consultar con un veterinario cuando sea necesario puede marcar la diferencia en su calidad de vida.